Para hacernos con ella, vamos a necesitar una yema de huevo, aceite de oliva y miel. Algunas puntualizaciones:
- La yema es la parte más nutritiva del huevo, por lo que es esencial para la mascarilla. La clara es opcional, si os apetece podeis incluirla, y si no, siempre podéis apartarla y reservarla para hacer una tortilla o lo que queráis.
- Si no tenéis aceite de oliva, puede ser de cualquier otro tipo; eso sí, cuanto más graso, mejor. A mí el aceite de oliva me gusta mucho para hidratar el pelo, se obtienen unos resultados muy buenos. Pero esto ya es un poco a gusto del consumidor.
Las cantidades variarán dependiendo de la largura y cantidad de cabello. Es conveniente añadir la misma proporción de miel que de aceite, para que no quede excesivamente líquido.
Lo único que tenemos que hacer es mezclarlo todo. A mano puede resultarnos un poco trabajoso lograr que la "masa" (especialmente la pareja miel-aceite) quede homogénea, así que si queremos hacerlo de forma más rápida y cómoda, metemos unos segunditos la batidora y listo.La textura debe estar a caballo entre la de la miel y la del aceite, de ahí que antes indicara añadir la misma cantidad de cada uno. No debe quedar tan líquido que escurra ni tan "meloso" que sea difícil de aplicar.
El siguiente paso es aplicarlo en el cabello. Si tenéis el pelo graso, aplicadlo sólo en las puntas. Si, en cambio, lo tenéis normal-seco, podéis subir un poco más, pero sin llegar a la raíz.
Lo ideal es esperar a que seque, a que seponga duro (no os preocupéis, con agua templada sale estupendamente).
Si no disponéis de tanto tiempo, podéis aclarar antes, pero yo nunca lo haría antes de 15 minutos para que la mezcla penetre bien.
Los resultados son inmediatos: nada más lavar (y secar) el pelo podréis comprobar que está mucho más hidratado, el efecto es especialmente palpable en las puntas.
En cuanto a la periodicidad, yo creo que la ideal sería entre semanal y mensual, es decir, nunca más de una vez a la semana ni menos de una al mes. Evidentemente, aunque la hidratación que hayáis conseguido ahí queda, se obtienen mejores resultados si se hace de una forma reiterada.
Pero es como todo, dependerá del tiempo y ganas que tengáis, y de los que os pida vuestro cabello.
Finalizo con sus pros y contras:
A favor
- Nutre.
- Da brillo.
- Es natural.
- Es barata.
- Es fácil de preparar, además de rápida.
- Los resultados son inmediatos.
En contra
- Necesitas disponer de tiempo para su aplicación (bueno, más bien, para que penetre).
- No es tan cómodo como comprar una ya hecha.
- Una vez aplicada, tienes la sensación de oler a torrija XD
Mi intención era colgar una foto del resultado en el cabello, pero me fue imposible hacer una ayer. Si saco un huequito, lo fotografío y la subo.
Espero que os haya gustado y que os animéis con ella. Yo os la recomiendo encarecidamente.
Me encantan las mascarillas naturales para el pelo. Yo suelo utilizar mucho para eso el aguacate, que deja el pelo muy suave y nutrido.
ResponderEliminarMe uno a tu blog, que quiero empezar a cuidarme más y sobretodo a hacer más deporte, que llevo ya muchos años sin hacer y noto que me hace falta.
Un beso!